Las universidades están preparadas para la vuelta a clase
Las universidades han establecido los protocolos que regirán la vuelta a clase a partir de las recomendaciones del Ministerio de Universidades. Se contemplan varios escenarios según la evolución del Covid 19.
El Ministerio de Universidades estableció unas recomendaciones para facilitar una presencialidad en la vuelta a clase en septiembre adaptada a la nueva normalidad. Plantea establecer los grupos respetando la distancia de 1,5 metros entre alumnos para saber si se puede volver a las clases presenciales o tienen que ser virtuales.
Las universidades apuestan por la presencialidad
Las universidades han acordado las normas para organizar el comienzo de curso, a partir de la experiencia vivida en el último trimestre del curso con la crisis del coronavirus. Al contrario que la Universidad de Cambridge que anunció que las clases del próximo curso serían virtuales, las universidades españolas apuestan por las clases presenciales, respetando las medidas de seguridad marcadas por el Ministerio: uso obligatorio de mascarilla y distancia de seguridad de 1,5 metros.
En Cataluña, las universidades públicas proponen un sistema híbrido que combina la docencia presencial con la virtual, por lo menos en la primera mitad de curso. En las clases presenciales, los alumnos tendrán que respetar la distancia física y llevar mascarilla dentro de los edificios si no se puede mantener esta distancia. En cuanto a los espacios comunes: bibliotecas, cafeterías e instalaciones deportivas pueden abrir siguiendo las recomendaciones de higiene y desinfección para evitar contagios.
En el País Vaso, la universidad de Deusto también plantea un modelo de presencialidad adaptada, en el que se da prioridad a las clases presenciales aunque una parte será virtual. Los grupos serán más pequeños para mantener la distancia dentro de las aulas. Las asignaturas se impartirán en dos horas presenciales y un hora online a la semana, y aunque la evaluación será continua, el examen final será presencial.
Las 14 universidades madrileñas han acordado una vuelta a clase escalonada durante el mes de septiembre para evaluar la evolución de la pandemia. El aforo máximo será del 50%, pero se han habilitado zonas wifi para que los alumnos puedan seguir las clases on line desde el centro. Las clases presenciales se concentran principalmente en los alumnos de primer y cuarto curso.
¿Qué piden los alumnos para la vuelta a clase?
Los alumnos piden tener acceso a los dispositivos y medios necesarios para acceder a la educación on line sin problemas, ya que este curso se ha demostrado que existían muchas carencias, sobre todo, a la hora de hacer los exámenes on line.
Si se soluciona este problema “lo más importante es la metodología” porque como señala Andrea Henry, portavoz de CANAE (Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes “estudiar on line no es simplemente “retransmitir” virtualmente una clase presencial, es crear mecanismos y metodologías que combinan ambas modalidades y permitan que los estudiantes refuercen los contenidos dados presencialmente de manera on line”.
Carolina García, presidenta de CREUP reclama una docencia telemática de calidad, cree que es necesario “aumentar la formación en materias digitales y disponer de infraestructuras y equipos tecnológicos para evitar la brecha digital”. Además cree que en el caso de implantarse un sistema híbrido que combine clases presenciales y virtuales, se debería prestar atención a las necesidades de los estudiantes que pueden tener problemas económicos para costearse una residencia para una asistencia semipresencial en la universidad.
Refuerzo de la plantilla de profesores y mejor formación on line
Desde el lado de los profesores, las recomendaciones propuestas por el Ministerio de Universidades para combinar las clases presenciales y virtuales no solucionan todos los problemas detectados en la enseñanza on line. “Pedimos un refuerzo de las plantillas docentes si hay que compatibilizar la enseñanza presencial y on line, porque si los grupos tienen que reducirse, los profesores no pueden asumir más sobrecarga de trabajo”, apunta Ramón Caballero, responsable de Universidades en el sindicato CSIF.
También reclaman más inversión del Gobierno central porque “las universidades necesitan recursos para adaptar las aulas y renovar las redes para evitar los problemas que han sufrido este curso”, señala Caballero. En este sentido, el anuncio de que de los 2.000 millones de euros que el gobierno va a dedicar a paliar los efectos de la pandemia se destinen 400 millones a las universidades es una medida positiva.
La tercera demanda de los profesores se centra en la formación on line. Después de la improvisación con la que los profesores tuvieron que enfrentarse a la enseñanza on line en el último trimestre del curso pasado, ahora reclaman que “las universidades capaciten a los profesores con formación y medios para afrontar una enseñanza y evaluación on line, sin tener que improvisar ni aprender sobre la marcha”, según el portavoz de CSIF. “No se puede confiar en el esfuerzo individual, la universidad tiene que prever está situación y estar preparada”.
¿Vuelta a clase presencial o mixta?
“Apostamos por realizar toda la actividad que sea posible de forma presencial respetando las medidas necesarias”, señala Carolina García. Piden a las universidades que sea aplicada la evaluación continuada como plantea el Plan Bolonia y que las prácticas y evaluaciones tengan prioridad en el sistema de presencialidad mixta. Además, los estudiantes que pertenezcan a grupos de riesgo deben acceder a la formación on line, mientras que para los de nuevo ingreso piden la enseñanza presencial, “porque son los que más abandonan la universidad”.
En general, profesores y alumnos creen que es prioritario mejorar la enseñanza on line ante la posibilidad de que vuelva a plantearse de nuevo el cierre de la universidad.